Desde que nacemos, la informaciu00f3n que nos llega del exterior es nuestra primera fuente de aprendizaje.
Si observamos detenidamente el desarrollo de un bebu00e9 en sus primeros meses de vida, vemos como comienza a girar su cabeza hacia la voz de sus padres, descubre sus manos y sus pies y, poco a poco, explora los objetos que puede alcanzar llevu00e1ndoselos a la boca.
Los u00f3rganos de los sentidos (ojos, ou00eddos, nariz, lengua y piel) captan la informaciu00f3n a travu00e9s de los receptores sensoriales y la envu00edan al sistema nervioso, y este organiza dicha informaciu00f3n determinando cu00f3mo responder a dichos estu00edmulos.
Ademu00e1s de los u00f3rganos de los sentidos, hay otros dos sistemas que proporcionan informaciu00f3n sobre lo que pasa alrededor y trabajan estrechamente con los sentidos: el sistema vestibular, que es el sentido del movimiento, equilibrio y orientaciu00f3n, y cuyos receptores se encuentran en el ou00eddo interno y proporciona al cerebro la informaciu00f3n necesaria para moverse con destreza por el medio y el sistema propioceptivo, cuyos receptores se encuentran en los mu00fasculos y articulaciones, y se encarga de indicar cu00f3mo estu00e1 el cuerpo colocado en el espacio, du00f3nde estu00e1n los brazos y piernas, etc. Es tambiu00e9n el que informa de la forma en la que sincronizamos los movimientos. En definitiva, es el responsable de la mayoru00eda de las actividades fu00edsicas que desempeu00f1amos diariamente.
La forma en la que el sistema nervioso recibe, procesa y organiza la informaciu00f3n que le llega del propio cuerpo y del exterior se denomina integraciu00f3n sensorial, se refiere, por tanto, a la manera que tenemos de desenvolvernos en el medio y a la forma en la que aprendemos.
En este sentido, la mayoru00eda de las personas con autismo o su00edndrome de Asperger presentan alteraciu00f3n en la integraciu00f3n sensorial. Observamos que muchas de estas personas, ante determinados estu00edmulos, sienten muchu00edsimo desagrado y molestia; lo que provoca que muchos de los aprendizajes sean suprimidos por la enorme molestia que sienten. Esto conlleva a un estado de alerta o hipervigilancia continuo, incluso ante situaciones inocuas que no deberu00edan generar ninguna alerta.
Lo podemos observar en las repuestas que dicha persona presenta ante diferentes estu00edmulos o ambientes. Balanceos del cuerpo, taparse los ou00eddos, conductas disruptivas o de evitaciu00f3n ante:
Situaciones como ducharse, ir a una peluqueru00eda, ir al dentista, ir a un centro comercial, asistir a determinadas actividades del colegio (comedor, patio, pasillos llenos), aspectos relacionados con la comida, el vestido, etc., pueden convertirse en una tortura para la persona con autismo o su00edndrome de Asperger y por ende para su familia. Desencadenando incluso conductas de estru00e9s y ansiedad.
Las respuestas desajustadas o desproporcionadas de las personas con TEA ante ciertos estu00edmulos o ambientes pueden mejorar considerablemente si se interviene y se hace un trabajo de estimulaciu00f3n sensorial. Intervenciu00f3n que se debe llevar a cabo por profesionales cualificados y formados en integraciu00f3n y estimulaciu00f3n sensorial.
La estimulaciu00f3n sensorial es la activaciu00f3n consciente de los receptores sensoriales para favorecer la correcta integraciu00f3n de la informaciu00f3n que reciben.
Para comenzar el trabajo de estimulaciu00f3n sensorial correctamente primero debemos conocer el perfil sensorial de la persona con la que vamos a trabajar. Es decir, saber quu00e9 aspectos interfieren en la conducta ante su percepciu00f3n del medio.
Para valorar correctamente el perfil sensorial de cada persona existen distintas herramientas. Uno de los test mu00e1s completos es el u201cPerfil Sensorial 2 de Dunnu201d que ha sido validado en Espau00f1a y nos permite valorar a una persona desde el nacimiento hasta los 14 au00f1os y aborda distintos ambientes como casa o colegio, entre otros.
Una vez determinado el perfil sensorial de la persona con TEA, se determinaru00e1 el programa de estimulaciu00f3n sensorial a llevar a cabo. Puede abordarse desde distintas vu00edas dependiendo del objetivo que queramos conseguir.
nLa estimulaciu00f3n puede realizarse de forma unisensorial, si nuestro objetivo es centrarnos en los estu00edmulos de un solo sentido (aunque recordamos que todos estu00e1n relacionados de una forma u otra) o multisensorial, cuando nuestro foco se centra en estimular varios sentidos a la vez.
nEl enfoque de la estimulaciu00f3n sensorial no debe verse solo como una herramienta para trabajar dentro de una sala de estimulaciu00f3n, ya que los sentidos mandan informaciu00f3n a nuestro cerebro durante todo el du00eda y, las respuestas que emitimos ante esa informaciu00f3n determinada necesitan de un correcto procesamiento sensorial para desenvolvernos en el du00eda a du00eda.
nPor lo tanto, el profesional debe dar a la familia estrategias que ayuden a que la persona con autismo o su00edndrome de Asperger tenga mejores respuestas sensoriales ante un estu00edmulo cualquiera en una situaciu00f3n concreta de su du00eda a du00eda.
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