La Asamblea General de las Naciones Unidas designó en 2007, al día 2 de abril como el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, con el fin de aumentar la conciencia pública sobre este trastorno, que cada vez afecta a más gente en el mundo, y también para generar actividades de difusión sobre la importancia del diagnóstico y la intervención temprana.
Cada 2 de abril se abre una puerta a la inclusión, la tolerancia y el respeto de las personas con este trastorno. Es un día para dar apoyo, cariño, comprensión y sobre todo visibilidad a los millones de personas que tienen o conviven con el TEA. A pesar de que su conocimiento esté cada vez más extendido, en la actualidad todavía existe mucha incomprensión y desconocimiento.
Por eso el día 2 de abril es una fecha clave para reivindicar un mayor apoyo social e institucional, y para concienciar a las sociedades modernas de la importancia de involucrar a estas personas en nuestro mundo para que se sientan parte de él y sepan que son importantes, que las conocemos y las queremos, logrando su integración para que tengan una vida plena y productiva.
Miles de personas identifican el lazo con piezas de puzzle de colores y el color azul, como símbolos del Trastorno del Espectro Autista, pero desconocen cuál es el origen de estos símbolos y, sobre todo, cuál es su significado.
El puzzle refleja la complejidad y el enigma de este trastorno y, aunque de momento no haya cura para esta condición, está comprobado que con atención temprana y las terapias adecuadas, las personas con TEA mejoran significativamente. Cada pieza simboliza a todos los agentes que intervienen en el proceso: la familia, los profesionales, la comunidad, etc. Cada pieza representa el puzle que cada día seguimos armando, buscando las piezas adecuadas, las piezas que faltan…
El que cada pieza del puzzle tenga un color diferente representa la diversidad de personas y familias que conviven día a día con este trastorno, queriendo simbolizar que existen tantos niveles diferentes dentro de este trastorno como matices de colores.
El autismo también se relaciona con el color azul debido a que la organización Autism Speak usa este color como corporativo. En 2010 lanzó una campaña, que tuvo una gran popularidad, en la que se iluminaron varios edificios de color azul para concienciar a la población sobre este trastorno. Desde entonces, el color azul se transformó en un símbolo de autismo, atribuyéndolo al mar, a veces en calma y a veces, turbulento, como ocurre con quienes presentan esta condición.
A pesar de la transparencia del agua, se suele atribuir al mar el color azul. Del mismo modo, cuando alguien me pregunta por qué el color azul simboliza el Trastorno del Espectro Autista, suelo contestar que representa el mar y las lágrimas; lágrimas de color azul como suelen colorearlas los niños.
Lágrimas visibles de las que recorren las mejillas y lágrimas invisibles de las que recorren el interior de las personas; en algunas ocasiones lágrimas de pena, impotencia, dolor… pero en muchas más, lágrimas de alegría, amor y emoción, por ejemplo, cuando una persona con TEA después de mucho esfuerzo y trabajo consigue algún pequeño gran logro.
El día 2 de abril es un día en el que las personas que tienen TEA y todas las personas que queremos a alguien con este trastorno, recibimos el apoyo, el cariño, la fuerza para seguir adelante… Nos sentimos un poquito más comprendidos y mimados a nivel social cuando nuestro entorno “se viste” de azul. Cada persona que ese día se pone algo azul, dando visibilidad al mundo TEA, se convierte en una gotita de ese mar en calma, que tanto necesitamos muchos miles y miles de personas y nos da energía para seguir luchando por un mundo más inclusivo para nuestros seres queridos.
Cada 2 de abril es un día importante. Este año, el 2020, creo que es más importante todavía. España vive momentos dramáticos generados por el Coronavirus; hay preocupación, hay dolor, creo que hay tantos sentimientos diferentes como hogares.
Todos estamos en nuestras casas, en la inmensa mayoría de los casos, llevando una vida que no es ni parecida a la que teníamos antes del Estado de Alarma. Para todos es difícil, para los adultos y para los niños, que permanecen en sus casas como campeones, derrochando alegría a pesar de no poder ver a sus amigos, salir a jugar, etc.
Hay personas para las que todavía resulta mucho más complicado este cambio tan drástico en su vida, como son con las personas con TEA. Ellas necesitan para que su mundo tenga sentido, que su día a día esté muy estructurado y de repente, ese orden y estructura ha cambiado de forma radical.
Por este motivo, este año, más que nunca, creo que se merecen que la sociedad les de visibilidad, por lo que ruego e invito a cualquier persona, a que el 2 de Abril, os vistáis con algo azul y ya que no podemos salir fuera de nuestros hogares, os hagáis fotos y las compartáis a través del estado de vuestro móvil, las redes sociales, etc.; pongáis algún mensaje significativo y/o cuando salgáis a aplaudir a vuestras ventanas y balcones a todas las personas que se lo merecen durante esta pandemia, lo hagáis vestidos de azul, o también aplaudáis por las personas con este trastorno y sus familias.
Vuestras aportaciones ese día, por muy insignificantes que os puedan parecer, seguro que hacen que algunas de esas bonitas lágrimas recorran nuestro interior.
Muchas gracias.
Ana Mª Sacristán Marcos trabaja como maestra de Educación Infantil y está formada como especialista en Logopedia y en TEA. Es autora de Las aventuras de Javier, de Cetea Ediciones.
Ana Mª Sancristan Maestra Educación Infantil y Logopeda y en TEA
Comunidad para familiares y profesionales que viven cada día con el Trastorno del Espectro Autista
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