Soy Hugo: Inserción laboral en personas con TEA

Soy Hugo - 22 años  (España)

Hugo es un chico auténtico, único, tenaz, muy sincero, muy interesante, un pelín misterioso en algunas ocasiones. Algo terco en sus ideas y a la vez entrañable.

Hugo llego a nuestras vidas hace 22 años.

Ya desde pequeño empezamos a notar cositas extrañas en él. Era nuestro primer hijo y como padres no estábamos muy experimentados en el mundo “niños”. El tiempo pasaba, dejábamos esa “espera” por si de repente alguna mañana Hugo hacía un click en su cabecita y así dejaba de hacer carreritas, movimientos raros con las manos, miradas perdidas, y salir ya la ansiada palabra” mama”, o “pan” o “no”, lo que fuera, con tal de oírlo hablar.

Como esto no sucedía, empezó nuestra andadura: que si terapias de un tipo, que si este nuevo tratamiento y hay que intentarlo a ver si funciona, que si consultas a pediatras, neurólogos, que si coche para un sitio, coche para otro, comiendo atragantados o sin comer, hasta que nos topamos con la realidad que siempre habíamos tenido enfrente y por desconocimiento no vimos: AUTISMO. Una vez que se le puso nombre y entendimos lo que le ocurría a nuestro hijo, empezamos a dar pasos firmes, con una única pretensión: Que Hugo pudiese llevar una vida lo más normalizada posible.

La importancia del equipo de profesionales en TEA

Durante todos estos años hemos ido aprendiendo y avanzando, cualquier error que hayamos cometido siempre nos ha servido para seguir aprendiendo y seguir hacia delante, sin lamentarnos. Aquí hemos venido todos sin manual de instrucciones, aunque a veces se nos olvide.

No ha sido, ni es, un camino fácil, pero al final se hace llevadero, sobre todo cuando ves que el esfuerzo merece la pena porque tu hijo avanza.

Hugo es un chico auténtico, único, tenaz, muy sincero, muy interesante, un pelín misterioso en algunas ocasiones. Algo terco en sus ideas y a la vez entrañable. Es una persona con un gran corazón, le encanta salir y ayudar a sus amigos. Hugo es muy amigo de sus amigos, demasiado en algunas ocasiones, es fiel y leal para aburrir. Adora los viajes, los videojuegos, los comics, ir a comer pizza.

De Hugo hemos aprendido muchas cosas

Nos ha enseñado a querer aprender sobre autismo TODOS LOS DIAS y para hacerlo es necesario tener abiertos tanto el corazón como la mente. Él te da señales de lo que necesita, solo hay que estar atentos para captar la necesidad y poner los medios.

Hugo nos ha demostrado que es un imán para las personas buenas. Todas las personas que rodean a Hugo tienen un corazón enorme. Se interesan, le ayudan, le intentan comprender y lo mejor, que le incluyen y Hugo se siente querido.

Inserción laboral en personas con TEA

Hugo tenía muchas ganas de terminar sus estudios y comenzar su vida laboral.

La vida de estudiante le sometía a mucho estrés debido al exceso de interacción con muchas personas muy diversas.

Y lo consiguió, comenzó sus prácticas en una academia de inglés. Sus compañeros y sus jefes estaban encantados con él porque es una persona muy eficaz, termina su trabajo antes que nadie, no se entretiene en absolutamente nada.

Además, es muy leal, tanto, que le encomendaron hacer una tarea relacionada con los bancos que era confidencial y no nos lo contó ni a nosotros.

Todos los empleados se marcharon a trabajar a sus casas, con lo que Hugo perdió sus apoyos y se hizo imposible su continuidad.

Actualmente, Hugo trabaja en la empresa familiar. Al principio nos costó encontrar las tareas adecuadas, aunque ahora ya tiene muchas cosas que puede hacer.

El resultado es que nos quita a todos el trabajo más tedioso, el que es siempre igual, justo el trabajo que Hugo adora. Todo el mundo le ve como una ayuda, es uno más en la empresa y se siente FELIZ de ser útil y de disfrutar del trabajo en equipo.

Todavía nos queda mucho por aprender y avanzar. Es como una carrera de fondo.

Si ahora tuviera que elegir una vida, sin ninguna duda se llamaría HUGO.

Mª Vanesa Cueto.

(Madre de Hugo)